Tal vez no lo sepas o no te
das cuenta,
Será porque nunca lo dije o
nunca lo demostré,
Sería posible que en algún rincón,
Mejor aún más, por alguna razón
del mundo
Desde a donde ahora yo
estoy,
Hasta el último rincón del
mundo o el multi-verso,
Tengo la capacidad de programar
en tu corazón,
Todos los códigos que Dios
me da,
Por la gran recompensa de tu
amor,
Con toda humildad te digo a
ti chiquita,
Soy un simple programador.
Ocultándome entre esos pesados
parpados,
Perdiéndome por la flora
fresca y tentativa,
De los abanicados de los
latidos de tu corazón,
Ahí estoy, cubriéndome del
frió de este invierno,
Para poder programar los
sueños más radicales,
De cono te debo: amar, querer
y cuidar;
Como un simple pajarito que
busca la navidad,
Ahí me encontraras, Dios ha
sido tan bueno,
Que me regalo la forma de
como programar,
La habilidad de cómo
entender a separar,
Los dulces sueños de las
amargas pesadillas,
Tu crees que yo no pienso en
ti,
Claro que si, solo yo soy el
único,
Solo yo puedo programar los
sueños de mi chiquita.
Entre la noche y la media
noche,
Entre los códigos binarios y
tus latidos,
Agrego esas líneas repetidas
de códigos,
Así como cada ciclo infinito
de “Te amos”,
Que te cuesta llevar su
caminata,
Haciendo me entender que te
cuesta repetirlos,
Será por la asfixiante forma
que te amo?
Pero hoy te revele mi
secreto y es verdad,
Soy culpable de programar
esos códigos,
Que escribí en tu cabeza y
se guardaron en tu corazón,
Perdona me mi chiquita, lo
hice por amor,
Aprovechando me de mis
habilidades,
Soy culpable por ese ser que
es anónimo,
Soy el programador de los
sueños pero,
Ahora tú
solo tienes los códigos de mi amor.